La testosterona es una hormona masculina conocida como andrógeno. Esta hormona es responsable de muchas funciones corporales, como el deseo sexual, la fuerza muscular, la producción de esperma, la distribución de la grasa corporal y la densidad ósea. Aunque clasificada como hormona masculina, las mujeres también tienen testosterona, pero en una concentración mucho menor que los hombres.
Los estudios de investigación demuestran que un nivel bajo de testosterona tanto en hombres como en mujeres puede provocar síntomas físicos y emocionales como la depresión. En este artículo analizaremos la relación entre la testosterona baja y la depresión.
¿Qué causa la testosterona baja?
Para comprender mejor el vínculo entre ambos, es importante que empecemos explicando qué causa la testosterona baja (T baja). Como condición de salud, la testosterona baja también se conoce como hipogonadismo, una condición que afecta a las glándulas sexuales del cuerpo.
Los hombres que han sufrido lesiones testiculares son los más susceptibles de padecer hipogonadismo primario. Según Healthline, esta afección suele estar causada por paperas, altos niveles de hierro en sangre y tratamientos contra el cáncer.
El hipogonadismo secundario se desarrolla cuando la hipófisis no recibe señales para producir más testosterona. Entre las causas de este fallo de las señales se incluyen el envejecimiento normal, la obesidad, la tuberculosis, el uso de medicamentos opiáceos y el VIH/SIDA.
Signos y síntomas de la testosterona baja
Un nivel bajo de testosterona puede desencadenar numerosos cambios en su vida emocional y física. El síntoma más evidente es un cambio en el deseo y la función sexuales. No es infrecuente que los hombres con un nivel bajo de testosterona experimenten un descenso considerable del deseo sexual. Algunos descubren que tienen dificultades para lograr y mantener la erección. Otros acaban sufriendo infertilidad.
Dado que la testosterona desempeña un papel fundamental en la fuerza muscular y ósea, una T baja puede causar pérdida de masa muscular y ósea. Estos cambios suponen un gran riesgo de diabetes, cardiopatías y osteoporosis.
Aunque los hombres de todas las edades pueden padecer un nivel bajo de testosterona, esta afección es más frecuente entre los adultos mayores.
La relación entre la testosterona baja y la depresión
La ansiedad, la irritabilidad, la depresión y otros cambios de humor son frecuentes en las personas con un nivel bajo de testosterona. Sin embargo, faltan suficientes estudios de investigación para identificar las causas de esta correlación. En la práctica médica moderna, la terapia con testosterona ayuda a mejorar el estado de ánimo de las personas con T baja.
Aunque los investigadores aún no han podido determinar con exactitud por qué la T baja causa depresión, se supone que tiene algo que ver con el papel fundamental que desempeña la testosterona para ayudarnos a sentirnos bien. Esta hormona aumenta la liberación de dopamina, el neurotransmisor cerebral responsable de tus sensaciones de placer.
También podría existir una conexión entre los niveles de testosterona en el organismo y la función de la serotonina. Un descenso de la actividad de la serotonina en el cerebro suele estar relacionado con sentimientos de depresión. La testosterona puede desempeñar un papel en la recaptación de serotonina en el cerebro, mejorando su actividad y el estado de ánimo general. Los investigadores también han teorizado que la testosterona puede tener propiedades ansiolíticas.
¿Cómo distinguir la depresión de un nivel bajo de testosterona?
Debido a los muchos síntomas que comparten la depresión y la T baja, el diagnóstico puede ser un poco complicado. El hecho de que la depresión, la ansiedad y la dificultad para pensar sean signos normales del envejecimiento también supone un reto. Los síntomas comunes de la depresión y la T baja incluyen:
- Tristeza
- Irritabilidad
- Ansiedad
- Problemas de memoria
- Problemas de sueño
- Bajo deseo sexual
- Problemas de concentración
En cuanto a los síntomas físicos, existe una diferencia significativa entre los síntomas de la depresión y la T baja. Las personas con depresión pero con niveles normales de testosterona no experimentan una disminución de la masa y la fuerza muscular ni hinchazón de las mamas, que se asocian a la T baja.
Los síntomas físicos de la depresión suelen centrarse en el dolor de espalda y los dolores de cabeza.
Testosterona baja en mujeres
El deterioro de la salud mental debido a una T baja no es un problema exclusivo del sexo masculino. Los estudios han demostrado que las mujeres con un nivel bajo de testosterona también sufren depresión. La T baja en las mujeres suele diagnosticarse y tratarse en mujeres posmenopáusicas o que están experimentando la perimenopausia.
¿Cuándo buscar ayuda?
Si se siente triste o experimenta síntomas como una disminución de su deseo sexual, un aumento repentino de peso y otros síntomas emocionales y mentales, debe concertar una cita con su médico. Los análisis de sangre y la exploración física pueden ayudar a determinar si sus niveles de testosterona son normales o si padece una deficiencia de andrógenos.
Existen muchas opciones de tratamiento eficaces que pueden ayudar a restaurar sus niveles de testosterona si sus niveles actuales son anormalmente bajos. Estas opciones de tratamiento se analizan en la sección siguiente.
Tratamiento de la testosterona baja y la depresión
Si sus síntomas de depresión están relacionados con un nivel bajo de testosterona, mejorar sus niveles de testosterona puede ayudar a mejorar estos síntomas.
Los niveles bajos de testosterona pueden tratarse con terapia de sustitución de testosterona (TRT). La terapia hormonal sustitutiva es la opción más popular para restablecer los niveles normales de testosterona. Para ello se utiliza testosterona sintética, disponible en muchas formas.
Este tratamiento puede administrarse mediante inyecciones, parches cutáneos o gel tópico. Su médico decidirá qué método de administración es el mejor para su salud, estilo de vida y cobertura del seguro. Sin embargo, si su depresión no está causada por una T baja, la TRT no le ayudará. No obstante, este tipo de depresión se puede tratar con la ayuda de un profesional de la salud mental.
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