Millones de niños y adultos de Estados Unidos con trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) han recibido ayuda gracias al tratamiento con medicamentos prescritos. Los medicamentos para el TDAH pueden afectar positivamente y beneficiar a las personas en la escuela, la carrera, las actividades y la vida cotidiana. Los síntomas del TDAH pueden reducirse significativamente mediante el uso de medicamentos o terapia, o ambos.
El trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) es una enfermedad neurológica frecuente. A menudo puede malinterpretarse, por lo que es crucial informarse sobre el diagnóstico y normalizar la trayectoria del TDAH. Suele diagnosticarse en la infancia. Sin embargo, también puede aparecer en la edad adulta.
Los síntomas comunes del TDAH incluyen:
Tipo hiperactivo
- Dificultad para esperar su turno
- Interrumpe y/o se entromete en las conversaciones
- Hablar en exceso
- Se mueve mucho en momentos en los que no es apropiado desplazarse
- Ignora las instrucciones de permanecer en un lugar
- Se retuerce con regularidad
- No puede realizar actividades tranquilamente
Tipo desatento
- Comete regularmente errores por descuido
- Olvida las cosas a menudo
- Se distrae con facilidad
- No puede prestar atención a una sola actividad
- No sigue las instrucciones
- Tiene problemas para organizarse
- No parece escuchar cuando se le habla
El tratamiento del TDAH con medicación se utiliza para abordar eficazmente estos síntomas. Sin embargo, puede tener efectos negativos. Más adelante en este artículo, exploraremos las muchas formas de medicamentos para el TDAH y cómo sus efectos secundarios pueden afectarle a usted o a su hijo.
Medicamentos para el TDAH
La medicación se utiliza con frecuencia junto con la terapia conductual para ayudar a aliviar los síntomas. Estos fármacos afectan a la química cerebral, permitiéndole controlar mejor sus impulsos y comportamientos.
Estimulantes
Los estimulantes elevan los niveles de norepinefrina y dopamina en el cerebro, lo que mejora la concentración.
- Anfetamina/dextroanfetamina (Adderall)
- Dextroanfetamina (Dexedrine)
- Lisdexanfetamina (Vyvanse)
No estimulantes
Los medicamentos no estimulantes se prescriben con menos frecuencia para el TDAH, pero pueden utilizarse si los estimulantes causan efectos secundarios adversos o son ineficaces. Ciertos medicamentos no estimulantes aumentan la norepinefrina y otras sustancias químicas cerebrales, que ayudan a concentrarse y prestar atención.
Los medicamentos no estimulantes incluyen:
- Atomoxetina (Strattera)
- Antidepresivos como Nortriptilina (Pamelor) o Bupropión (Wellbutrin)
- Guanfacina (Intuniv)
- Clonidina (Kapvay)
Efectos secundarios frecuentes de los medicamentos para el TDAH
Cuando se recetan por primera vez, los medicamentos para el TDAH pueden causar algunos efectos secundarios tempranos. El organismo puede tardar varios días o una semana en adaptarse a la medicación. Algunos efectos secundarios desaparecen, mientras que otros pueden persistir. Si la medicación para el TDAH causa efectos secundarios prolongados que son preocupantes, coméntalo con tu médico inmediatamente. Su médico puede ajustar la dosis o recetarle un medicamento diferente.
Efectos secundarios:
- Problemas de alimentación
Los medicamentos estimulantes pueden causar problemas de alimentación. La medicación estimulante puede actuar como supresor del apetito y la persona puede experimentar poco o ningún deseo de comer. Si la pérdida de peso es preocupante, consulte a su médico.
- Dolores
La pérdida de apetito puede contribuir a otro efecto secundario: dolores de cabeza, dolores de estómago o náuseas. Esto puede ser consecuencia de tomar la medicación con el estómago vacío.
- Problemas de sueño
La medicación para el TDAH puede alterar el sueño, sobre todo si sigue activa a la hora de acostarse. Si utilizas un medicamento de acción corta, es posible que la segunda o tercera dosis se administren demasiado tarde y aún no hayan hecho efecto. Si usas un medicamento de acción prolongada, quizá quieras probar con uno de acción más corta.
- Tensión arterial
La mayoría de los medicamentos para el TDAH son estimulantes. Pueden aumentar la tensión arterial y la frecuencia cardiaca. Informe a su psiquiatra si padece alguna enfermedad preexistente relacionada con la tensión arterial o el corazón. Las estadísticas muestran que los adultos mayores que empezaban a tomar un estimulante mostraban un aumento del 40% en su riesgo de infarto, ictus o arritmia ventricular en un plazo de 30 días.
Ejemplos de medicamentos estimulantes para el TDAH:
- Anfetamina (Evekeo)
- Dextroanfetamina (Adderall, Adderall XR, Dexedrine, ProCentra, Zenzedi)
- Dexmetilfenidato (Focalin, Focalin XR)
- Lisdexanfetamina (Vyvanse)
- Metilfenidato (Concerta, Daytrana, Metadate, Methylin, Ritalin, Quillivant)
Medicamentos para el TDAH y adicciones
Algunas investigaciones sugieren que existe una conexión entre la medicación para el TDAH y las adicciones. El uso indebido y el abuso de los medicamentos para el TDAH pueden producirse ya en la adolescencia o en la edad adulta. Es importante señalar que, cuando la medicación para el TDAH se utiliza tal y como ha sido prescrita por un médico, las personas no corren peligro de desarrollar adicción a ella. El uso indebido de anfetaminas tomando una dosis superior a la prescrita puede conducir a otras adicciones.
Los indicadores del uso indebido de medicamentos para el TDAH pueden incluir:
- Aumento de la ansiedad
- Dependencia física
- Fallos de memoria
- Problemas cardíacos
- Comportamientos inusuales
- Hiperactividad
- Confusión y delirios
- Irritabilidad
- Cambios de actitud
La clave para un tratamiento exitoso del TDAH, es un seguimiento continuo de sus síntomas, su progreso y cómo la medicación para el TDAH está afectando su bienestar mental y físico. Mi Psiquiatra contribuye a resolver las crisis de salud mental proporcionando servicios a través de Telemedicina y en nuestras oficinas hechas a medida y acogedoras en los condados de Miami Dade, Broward y Palm Beach.
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